Melatonina.
Hormona que ayuda a conciliar el sueño, segregada por la glándula pineal (en tu cabeza) que funciona sin estímulos luminosos.
Nah, no es esa estupidez de venir y meterte DMT solo porque «quieres descubrir la verdad».
Si no que lo haces porque de verdad,
de verdad,
requieres dormir sin recurrir a otros somníferos.
Así como yo,
que ahora me estoy pegando a la naturaleza y haciendo una con ella.
Namasté.
Nama-gofvckyovrself.
Mira pues, nada más, qué interesante.
Es bonito darte cuenta de cómo carajos funciona el cerebro humano.
Me intriga mucho, a decir verdad.
Eso explica por qué estoy en la universidad,
sin ganas de seguir,
pero ahí estoy.
Es gracioso cómo la gente intenta alejarse de la "realidad" con esto de las drogas.
—Fijate es otro trip.
—Es que descubrís otro mundo.
—Entendés cosas que antes no hacías.
—Encontrás la verdad pero no es fácil ponerla en palabras.
¿Qué?
¿De qué
viaje,
mundo,
entendimiento,
verdad
me hablas?
Si algo te «ilumina», se supone que te llena de sabiduría y te hace entenderlo todo de mejor manera, haciendo que tu experiencia con todo lo que te rodea sea enriquecedora y, aunque te cueste, terminas por poner todo en palabras.
Por que tu mente se vuelve más
«abierta»
ante todo
y todos.
Simple y sencillo.
Sin tanta vuelta.
Fácil.
¿Qué hago yo hablando de drogas?
Ni me lo preguntes.
En serio no tengo ni la menor idea de por qué
lo estoy haciendo.
Si te lo preguntas,
no,
no he tenido contacto
con estupefacientes
hace ya
mucho
muchísimo
tiempo.
¡Eso sí!
El estar frente a la pantalla después de haber tomado una pastilla de melatonina no es naaaaaaaaaaada sano.
En ningún sentido.
Por ningún motivo.
Es muy gracioso, cómo me amo.
Soy la persona más graciosa que conozco.
No, que eso último es mentira.
He pasado noches en clase
con la idea de que
mi celular
va a sonar por alguna
«extraña»
razón.
¿Lo ha hecho?
Jamás.
Me quedé sin alcohol estos días.
También sin tabaco.
¿Qué hago yo?
Nada.
Ya no tengo nada
y
sin nada me voy a quedar.
A veces voy por la calle y me digo.
Sería muy chistoso verlo.
Lo miro.
Mi mente es tan poderosa que
me hace verlo.
Lo llamo.
Me contesta.
Se ríe.
Qué ridícula.
Qué ridícula
soy.
Siempre.
Me gusta mucho escuchar
a Deftones
o a Zoé
cuando escribo así,
deSoRdEnadO,
coN
MuChOs
prObLEmAs
dE
pOr
MEdIo.
Al igual que escuchar
synthwave.
¿Acaso a alguien le gustará
el synthwave
tanto como a mí?
Es que es bonito.
Te pones los audífonos,
cierras los ojos
y te vas
a un mundo de colores
neón,
con ambiente
futurista.
Futurefunk 2019 (?)
Eso es lo que me transmite a mí,
no tengo idea de cómo sea con
los demás.
De todos modos,
¿alguien se tomará la molestia
de escuchar y
no oír la música?
Trataré de poner los dedos en otro lado del teclado y escribir así.
No.
nO.
oN.
La sensatez,
me va a terminar ganando ésta vez.
Soy tan mala hasta para rimar,
¿será que tengo que ir al mar?
Quizás, quizás,
aunque debería de no seguir existiendo más.
Quiero irme de viaje, ¿sabes?
No porque necesite
E
N
C
O
N
T
R
A
R
M
E
Porque ya me tengo,
porque ya estoy conmigo.
Sino porque...
No tengo idea.
Solo quiero regresar a esa tierra bonita que cómo
amo.
Esa que conocía solo por voces.
por palabras.
Hasta que la visité.
Quiero sentir que es
un sueño
otra vez estar ahí,
irme con la excusa de
que voy a hacer
«diligencias».
Desaparecer
Desaparecer
días,
semanas,
meses...
Nah, tampoco
tanto,
un par de días
tal vez.
Así sería
bueno.
Buneo.
Nuoeb.
Me gusta mucho escribir de ésta forma.
Así puedo explicarme
de manera
más
fácil,
supongo.
Aparte eso que
nadie,
absolutamente nadie,
se interesa por leerme.
Siempre estoy aquí,
leyéndome,
riéndome,
burlándome,
queriéndome prender
fuego,
pero aquí
estoy.
¿Dije alguna vez que
me enamoré de un lugar?
¿Dije a alguien que
una vez hablé con el mar?
Creo que
sí.
Creo que
no.
No tengo idea.
Pero esa última
experiencia
fue la que más
me cambió.
El mar tiene cierta
conexión con tu
cuerpo
y de, una forma
u otra,
logra entrar en tu mente
y tomarla
por un tiempo.
Yo le tengo cierto
miedo
al océano,
al agua en general;
pero esa vez fue
una excepción.
Ese océano, el amor
de mis
amores,
tomó una voz
que yo amo
y que extrañaba
escuchar;
me dijo:
«Ven conmigo,
que yo te protegeré,
que yo te amaré,
que yo sanaré
tus heridas,
que te salvaré
de ese dolor
que sientes».
Veía al horizonte,
no había nada,
no había nadie,
solo estaba
yo;
mi familia estaba
lejos,
muy lejos
de mí.
Caminaba,
sin voltear
atrás,
escuchaba esa
voz,
la amaba,
la extrañaba,
la necesitaba;
dejé de
respirar...
Puede sonar tonto,
pero me gusta poder rebuscar cosas
antes de escribirlas en la entrada.
Tengo muchas pestañas
en el navegador
abiertas,
demasiadas
debo decir.
Para que no se note,
de que prefiero perder unos tantos
segundos
antes de dar información
errónea.
Y para
rematar,
al fondo suena
"Uluru Rock".
Que no mienta,
jamás,
nunca;
por que
todas las
noches,
ésta chica,
le deja bailar
entre sus
recuerdos,
nadar
entre sus
cabellos,
reposar
en sus
ojos
y
dormir
en su
corazón.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario