I Am Not Real...

27. Juni
Mi tristeza volvió a atacar otra vez. Esa maldita tristeza, mi aislamiento, mi dolor, mi melancolía.
Tengo muchas razones para intentar sonreír ahora, para intentar ser feliz, pero no, parece que mi cerebro no quiere asimilarlo. Quizá no se siente capaz de asimilar la felicidad que no había sentido desde hacía tanto tiempo.
Es una mierda.
Esto me afecta demasiado, es tan doloroso y mortificador como un Harakiri. El dolor tan fuerte, el ardor insoportable, es algo que quisiera detener con el simple hecho de acurrucarme en mi cama bocabajo y empezar a llorar. Llorar hasta ahogarme en mis lágrimas, órganos, sangre, cabellos, sollozos, pensamientos, recuerdos, pesares... Todas esas estupideces. Quizá sin sentido, yo qué sé.


Quisiera llorar hasta que la cabeza me estalle en mil pedazos.
Llorar hasta que toda esa maldita tristeza sea masacrada, hasta que pueda morirme.
... Por eso se dice que nadie ama al dolor por ser dolor.
Nadie es feliz cuando sufre emocionalmente...
Lastimosamente yo estaba tan errada en mis pensamientos que ocultaba lo que sentía, moría ahí, en mi dolor.
Me equivoqué. Claramente me equivoqué.
Que estúpida me siento por confiar en mí...
Por confiar en que podría seguir adelante sin volver a recaer en lo mismo...
Y lo hice...



30. Juni
De mi alegría o mi tristeza, la gente sabrá por mis escritos.
Que en ningún lado soy sincera.
Ni frente a alguien,
Ni por llamada,
Ni por mensaje...
Por nada...
-
Jamás he ido al funeral de una persona..
Pero ahora parece que estuviera en uno.
Mientras escucho música deprimente...
Se supone que lo hago para alegrarme un poco;
Mas no da el resultado esperado.
No tiene caso dar la vida día con día, por aquello que ha muerto...
Tengo la necesidad de llorar, pero no puedo hacerlo.
No creo que haya pasado ya tanto tiempo.
No acepto aún ser tan débil...
Ya no quiero escribir, ya no quiero seguir dedicándole tiempo a un acto sin sentido; sobre todo cuando sé que no volverá...
Hoy admito que no soy real. Sólo soy aquello que toda la gente quiere...
-
¿Por qué tiene que doler?
¿Por qué tiene que importarme tanto?
¿Por qué carajo siempre tengo que ser tan débil con todo?
¿Por qué tengo que depender para ser feliz?
¿Por qué tengo que complicarme cada vez más por todo?
¿Por qué la gente no deja de recordarme todo lo que odio de mí?
¿Por qué tengo que ser yo?
-
No puedo y no podré.
Me mata por dentro y me hace caer.
Aún me aferro de aquello...
De aquello que un día fue.
De aquello que amo con locura.
De aquello que tanto me hizo soñar.
... Porque jamás quiero decirle «adiós».
-
Amo más aquello que fue; todo eso que sigo amando con tal fervor que creo estar volviéndome loca. Hoy día... Desconozco lo que es tal como desconozco lo que ahora soy...



2. Juli
Nuevas metas, nuevas esperanzas, nuevas ilusiones, nuevos sueños... Nuevo todo...
Y justo hoy me doy cuenta de ello.
No me imaginé que fuera algo como eso...
Me he dado cuenta de que sigo tan débil como antes... Quizá jamás lo pueda arreglar, quizá jamás pueda dejar de ser así, quizá así soy y así me voy a morir.
Me he vuelto a quebrar. He vuelto a ser rota en millones de pedazos...
Soy un asco, un maldito desorden, un acertijo imposible de resolver, un cristal roto... Soy algo que puede herir o enojar a quien sea.
Soy lo peor.
... No entiendo por qué jamás me puede ocurrir lo contrario.
Por qué tengo que ceder ante alguien que quiero por quedar bien...
¿POR QUÉ SIEMPRE TENGO QUE QUEDAR BIEN CON TODOS? ¿Acaso no puedo ser yo misma o ser feliz con lo que hago y quiero hacer?
¡¡NO!! Siempre tengo que agradarle a todo mundo...
Y eso me duele...
Ellos no tienen idea de lo mucho que duele.
Preferiría que la gente me quiera por lo que soy y no por lo que ellos quieren que sea.
Preferiría poder largarme de aquí... Ir a otro lugar, donde no conozca a nadie, donde nadie me conozca...
Alejarme de todos...
A veces pienso que me estoy volviendo loca por pensar así.
Por pensar que todos me hacen daño y que no hay nadie para mi socorro.
Pero no lo sé, le digo al mundo que me gusta estar sola, pero no sentirme sola...
Algunas noches se me da por extrañar algo que se perdió, algo que se supone ha quedado en el olvido, pero es un peso que aún llevo a mis espaldas.
Esto ya no tiene sentido.
Han pasado ya un tiempo... Sin eso tan bello, sin eso que me hizo romperme en felicidad y en tristeza miles de veces... Para ser reconstruida con disculpas, una y otra vez.
Que repetitiva era mi vida.
Que repetitiva es mi vida.
Parece que lo seguirá siendo si no hago algo para que cambie.
Pero aquí estoy, feliz, tragándome las lágrimas y diciendo que estoy bien sin sentido alguno.
¡Qué bonita forma de intentar seguir adelante! Muy, muy bonita forma.
Renegándome gustos, intentando olvidar gente, tratando de llorar, sufriendo, rasguñando mis brazos esperando a que mis venas revienten.
Creí que iba a lograr algo bonito, no sé, ni idea.
Pero, como siempre me hacen creer, «Las cosas pasan por algo, todo tiene una enseñanza y una bendición».
Suponen ellos que debo ir por mi vida con esa vana y estúpida idea en mi mente durante toda mi vida…
Suponen bien.
Lo más triste de todo esto es, que, a pesar de tanto que digo y «sufro» jamás llego al punto de llorar tanto hasta ahogarme, morderme, golpearme, gritarme, discriminarme, rasguñarme, cortarme, hacer todo eso que hacía antes y disfrutar de mi llanto hasta encontrar consuelo en mis ilógicos y absurdos pensamientos que me reconfortaban.
Como lo hacía antes.
Lo hacía antes.
Hacía antes.
Antes.
Ahora ya no puedo.
Hoy día es raro ver que una lágrima recorra mis mejillas.
Es aún más raro que mis ojos se humedezcan por lágrimas.
Es raro ver una expresión feliz en mi rostro.
Soy una rareza que nadie quiere tener a su lado.
...
A veces pienso que estoy muerta.
Ya no he encontrado otro sentido para seguir aquí, en esta vida.
El suicidio es mi mejor opción. Debo de esperar a que algo me mate o morir de forma natural.
Pero como muy bien sé que a la vida le gusta jugar muy sucio, creo que me hará esperar por mucho, mucho tiempo.
¿Qué estará pasando ahora?
Pienso en resignarme, en alejarme de todos esos seres humanos tan complejos para redirigirme en lo que se supone que aún soy. Para entenderme, poder explicarme, sobrellevarme, soportarme, estudiarme... Todo eso.
... Me encantaría que alguien respondiera: ¿Quién puede amarme y a lo que se supone que sigo siendo?
Simplemente quiero... Quiero entender qué pasa conmigo.
Quisiera entender por qué me complico tanto.
Quiero entenderme.
Quise entenderme.
Quise...
-
Tanto que deseaba ir ahí.
Y lo hice, llegué.
Pero lo malo de esta vez, era que estaba sola.
Completamente sola.
Veía gente caminar de arriba a abajo, como lo he hecho desde siempre.
Grupos de amigos reír y hacer bromas entre ellos. Familias disfrutar de esa mañana-tarde. Parejas complementándose uno al otro...
Sin darme cuenta, sí estaba acompañada.
Estaba aquella incesante soledad y aquella molesta frustración, ambas a mi lado.
Una me veía sonriente, maliciosa.
Otra me veía seria, compasiva.
Ambas entendían mi sentir, ambas sabían qué era lo que rondaba por mi cabeza.
Y la ansiedad comenzó.
No podía calmarme. Iba entre la gente, empalidecida, desesperada, con la mirada perdida; buscando aquello que jamás he podido encontrar.
Caminé, con lágrimas en los ojos, mientras algo me pedía que huyera de aquel lugar; que corriera y que dejara atrás todo. Pero no pude.
Seguí caminando hasta el final de esa calle... Bajé la mirada, suspiré y, de nuevo, volví a perderme entre la gente.


4. Juli
Mientras sienta esto, quisiera disculparme...




[En este tipo de publicaciones es cuando dejo un poco de lado el lenguaje culto, para dar a conocer mucho de mí. Donde dejo de ocultarme y soy sincera conmigo misma...
Donde encuentro consuelo hablándole al aire sobre todo aquello que me hace perder la calma].